ORÍGENES
El proyecto ROCCE HOMES es fruto de una combinación de entusiasmo, creatividad, competencias varias y, sobre todo, de la profunda amistad que une a sus fundadores: Marina, Vincenzo y Luca.
Sus vidas se cruzaron hace mucho tiempo en la playa situada entre las escolleras de Andora, Le Rocce de Pinamare, donde de chicos solían pasar gran parte de sus veranos.
Este típico entorno de Liguria se fue convirtiendo poco a poco en el escenario de entrañables recuerdos de infancia y adolescencia: al igual que las típicas rocas que definen esta playa, la relación entre ellos se ha mantenido inalterable a lo largo del tiempo, aunque las mareas de la vida los hayan llevado a destinos diferentes e inesperados.
Su compartida pasión por valorizar la belleza y autenticidad del territorio que los vio crecer, combinada con su energía creativa y los conocimientos de Vincenzo en ingeniería de la construcción, desembocó en un sueño común: dar nueva vida a una residencia excepcional en las colinas del Piamonte, depositaria de maravillosas historias que merecen transmitirse.
Historias que encierran el entusiasmo del presente, el impulso hacia el futuro y los entrañables recuerdos que cada uno de nosotros lleva dentro. En otras palabras, historias como la de ellos. El hilo conductor con los lugares de su juventud es precisamente el territorio donde deciden emprender su proyecto. En efecto, hace entre 6 y 2 millones de años, el Roero era una zona costera y su suelo se ha ido forjando a partir del fondo marino donde, aún hoy, pueden encontrarse fósiles de conchas y pequeños peces.
El Roero se ha convertido entonces en el lugar donde se estrechan sus lazos, se materializan sus ideas y se concretan sus sueños.
En unos pocos meses de exploración, descubrieron la primera antigua casona en desuso –que pronto se convertiría en Casa San Grato–: la suerte estaba echada. Este primer experimento fue concebido como un lugar apto para familias y huéspedes de todas las edades, mientras que el concepto fundador del segundo proyecto –Casa Clara– fue el de crear un remanso de romanticismo y el del tercer y último proyecto –Casa Gallo–, está destinado en cambio a grandes grupos de huéspedes con intereses comunes: de hecho, la villa puede acoger a los amantes del vino y la gastronomía, un oasis para quienes desean el contacto con la naturaleza, un templo de serenidad para quienes practican yoga.
La iniciativa de devolver la vida a las antiguas casonas abandonadas del Roero ha sido recibida con calidez por la comunidad local e involucró a viticultores, productores locales, artesanos, administradores públicos, etc. Promover un tipo de turismo sostenible y orientado a la autenticidad de las experiencias encarna, de hecho, una promesa de renacimiento del territorio. La densa red de apoyo que se ha creado ha contribuido a aportar ese toque de sincera pasión que ha hecho posible un sueño colectivo.
Este camino surge del deseo de ir más allá de lo ordinario, del valor de la simplicidad unido al cuidado del detalle. ROCCE HOMES no es una mera firma: es una iniciativa que lleva consigo las raíces de un vínculo sincero y el deseo de inspirar a otras personas. Por otro lado, cada una de nuestras villas representa una promesa de belleza y autenticidad. Al igual que aquellos entrañables veranos que Marina, Vincenzo y Luca disfrutaron juntos en la playa de Pinamare.
